CRONICA TRIATLON OLIVA 2010

Malo el tiempo, pero es que el infierno que pase en la carrera a pie podría haber sido narrado en uno de los círculos de la Divina Comedia. Pero vayamos por orden.
El mar estaba que daba gusto verlo; con unas olas que hicieron a mas de uno preguntarse que había hecho para merecer esto, pero que como siempre digo son las mismas para todos. Como podemos pasamos la rompiente y podemos empezar a nadar. Enseguida tengo un enganchón verbal con un capullo que se pone a gritar pero me paro lo mando a tomar por el culo y continua calladito. No se me hace muy largo a pesar del oleaje, la corriente y alguna medusa del tamaño de una bolsa de Mercadona. Cuando llegamos a la rompiente de salida nos engancha una ola que a mi me arranca las gafas y a mas de uno lo hace rodar como una croqueta. Salgo como puedo y engancho la bici. 30'03'', no esta mal para como estaba el mar.

En el tramo de recta hasta Pego la concentración de ciclistas es considerable, pero me engancho al acople y tiro a mi marcha tratando de buscar espacios para estar lo mas alejado posible de otros ciclistas. Oigo una moto a mi lado:

- Si no os separáis os saco tarjeta amarilla.

- ¿Me dices a mi?

- Si, no se puede chupar rueda.

Le miro sorprendido y me pongo a discutir con ella explicándole que somos 600 en una carretera de un carril de menos de 3 metros, que no cabemos todos y que voy a distancia suficiente. Después de discutir un rato conmigo y de ver los 100 ciclistas que iban delante, entra en razón y va a por otros que si iban a rueda. Era una jueza de veintipocos años y me pregunto los triatlones sin drafting que habrá hecho y si a los jueces no tendrían que obligarles a tener cierto curriculum deportivo. Sigo rodando a buen ritmo, acoplado todo lo que podía (que fue mucho) y disfrutando de la bici. En la T2 me pongo las zapatillas y decido meter ritmo vivo para alcanzar a Guillermo, que sabia que no lo tenia que llevar muy lejos, pero a los 300 metros me entra un dolor en el pecho que rápidamente se me pasa al costado derecho. Tranquilo, es flato, baja un poco y sabes que en unos minutos se te pasara-me digo. Pero no, esta vez no. Los pinchazos se empezaron ha hacer cada vez mas agudos y me obligaban a correr a un ritmo que me parecía que iba andando. Y así hasta meta, pasando un calvario y de las peores sensaciones en carrera que recuerdo. Aun con todo baje un par de minutos del tiempo del año pasado gracias sobre todo a los 11 minutos que rebaje en la bici.

Ya me desquitare en Canet en un par de semanas.

2h56'48''

Natación: 30'03''

Ciclismo: 1h24'25''

Carrera: 52'43''