Parecía que iba a ser un buen día. Lo que en un principio era una salida con Nacho para que subiera el Garbi por primera vez, se convirtió en una grupeta de cinco. Desde Betera subimos por Canteras y en el cruce, maldito cruce, para Serra a buscar Oronet y Garbi. Cada uno a su ritmo, y yo como siempre con el diesel, que aun fue suficiente para coger a Nacho y puede que hasta para coger a Guillermo, si se descuida. De bajada, a lo lejos, vemos que en el cruce con Canteras hay una ambulancia y policía. Se oye el helicóptero, lo que ya es sinónimo de malas noticias. El pasajero de un coche que me adelanta me dice-"uno de los vuestros". Enseguida veo a los médicos de pie, sin hacer nada. Eso solo puede significar lo que se confirma cuando al pasar solo hay un casco de ciclista y una sabana cubriendo un bulto sobre el asfalto. El sentimiento a partir de ahí fue desolador. No haría ni 40 minutos que habíamos atrevasado ese cruce. La vida es injusta y castiga muchas veces a quien no se lo merece mientras no se para en quien estaría justificado un castigo, o algo peor. Mas injusta aun cuando nos enteramos que era alguien muy joven. Con toda la vida e ilusiones por delante que se acabaron mientras practicaba deporte. Un día triste que se vuelve aun mas triste.
Lunes: Carrera 9,47 km en 51'08'' a 5'24'' en ayunas
Hoy: Bici 64,53 km en 2h37'12'' a 26,6 km/h y 750 metros ascensión
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